Un poquito sobre historia
Sobre hecho, en las dramas griegos asi como romanos, asi como en la temporada isabelina, todo el mundo los papeles de hembras eran representados por hombres, que se vestian con prendas femeninas. Precisamente es en el teatro a donde goza de su motivo el hecho de que las integrantes del sexo masculino se engalanen como feminas.
Aspecto transgresor
En una mundo igual que la occidental, con una larga habito judeocristiana, a donde las roles de el hombre asi como sobre la femina estan maravillosamente definidos asi como donde la ropa supone la manifestacion exterior sobre la sexualidad -las hembras con saya, los hombres con pantalones-, la urgencia sobre transgredir esos patrones establecidos seria la principal motivacion que lleva a un varon a disfrazarse de femina.
El carnaval
Es en el Carnaval, fiesta de la transgresion por antonomasia, cuando mas se lanzan los miembros masculinos al velocidades sobre papel. Al fin asi como al cabo, cualquier disfraz es un rol social con que se simulan comportamientos que nunca estan bien vistos. asi como es que en la mundo, segun opina la psicologa M? del Mar Fajardo, “las reglas sociales son mas rigidas Con El Fin De los miembros masculinos -no podrian maquillarse, solo se les posibilita llevar pantalones, etc.-, por lo que la conveniente manera sobre liberarse es tener un proceder opuesto al que se espera de ellos”.
Hacia roles mas difusos
Aparte, el familia sobre esta festividad es, precisamente, el canje de papeles: Ahora en Roma los esclavos ocupaban el ya que sobre las senores y viceversa. No obstante tambien en esto las tiempos cambian. Segun explica Alberto Ramos Santana, catedratico de Historia Contemporanea de la Universidad sobre Cadiz, “que un hombre se vistiese sobre femina se consideraba mas transgresor permite anos de vida que Hoy, ya que suponia adoptar un pliego absolutamente opuesto a lo establecido social y politicamente”. Sobre la misma impresion es Fernando Giobellina, monitor sobre Antropologia sobre la Universidad de Cadiz, quien afirma que En el presente la desigualdad de roles ya nunca seria tan rigida: “las chicos llevan pendientes, cabello largo. Posiblemente huviese menos hombres que se disfracen sobre femina que permite 40 anos. Antes habia mas necesidad sobre irse del encasillamiento (el varon macho)”.
Distraccion debido a femenino
Pero Existen otras demasiadas razones por las que a los varones les gusta disfrazarse de femina. El sociologo Enrique Gil Calvo tiene una teoria en la cual se da una curiosa paradoja: por un bando, los miembros masculinos sienten la atraccion sexual por los signos sobre feminidad, asi como canalizan ese deseo a traves del disfraz, porque sobre este modo ven en si mismos lo que quieren en la mujer y es una manera de apropiarse sobre lo que se desea (las atributos femeninos).
Muchas veces responde igualmente a un anhelo sobre parecerse an alguna cosa que se valora y admira. En este significado, la escritora Elizabeth Badinter hizo una reflexion en por que gran cantidad de varones envidian al sexo opuesto: “ser hombre implica un esfuerzo que da la impresion nunca exigirsele a la femina. Al caballero se le desafia de forma permanente con un “muestra que eres hombre”, asi como esta manifestacion requiere unas competiciones de las que la chica esta exenta”.
En ocasiones puede ser un signo de misoginia
Ademas es un sena sobre misoginia cuando lo que se pretende es parodiar asi como ridiculizar a las hembras. De alli que todo se exagere: labios pintarrajeados, pechos y trasero enormes. La oracion que resume este dilema es: “las chicas son despreciables por motivo de que las deseo”. “realmente, los miembros masculinos que se disfrazan por este finalidad intentan neutralizar su temor a la mujer, que ven como la vulva dentada que puede manejarles a su antojo con las armas sexuales”, explica Enrique Gil Calvo.
Hoy por hoy bien, cualquier lo cual entra dentro sobre lo habitual y es distinta sobre cuando un hombre solo se excita sexualmente contemplando o vistiendose con lenceria femenina. “pero solamente podria hablarse de desorden, si la necesidad masculina sobre vestirse de femina habitualmente interfiere en su vida cotidiana”, aclara la psicologa M? del Mar Fajardo.